La tecnología actual ofrece un amplio abanico de posibilidades tanto a nivel de usuarios particulares como también de empresas y organizaciones. Contamos con múltiples herramientas, equipos y software que de una u otra forma nos hacen la vida más fácil. Un ejemplo es todo lo relacionado con el Internet de las Cosas o dispositivos IoT. Es algo que está cada vez más presente en nuestro día a día y que en los próximos años va a tener una explosión definitiva.

Qué es el Internet de las Cosas

Seguro que hemos escuchado en múltiples ocasiones hablar del término IoT o dispositivos del Internet de las Cosas. Ahora bien, ¿qué es esto realmente? Básicamente podemos decir que es un concepto que se refiere a todo tipo de dispositivos, máquinas, tanto domésticos como empresariales que están interconectados con objetos cotidianos.

Pongamos como ejemplo una bombilla en nuestra vivienda o un panel luminoso si pensamos en una empresa o lugar más amplio. Estos objetos pueden tener sensores y estar conectados a la red para que desde la distancia podamos controlarlos. Podemos obtener información sobre el tiempo que han estado encendidos, configurarlos para que se apaguen cuando haya cierta luminosidad, que reduzcan su consumo si no hay nadie cerca, etc.

El Internet de las Cosas abarca un campo muy amplio. Cada vez tenemos más dispositivos conectados a la red y eso nos aporta un plus en nuestro día a día. Especialmente cuando hablamos de empresas es esencial contar con estos equipos IoT que aportan valor, sirven para reducir gastos y, en definitiva, tener un mayor control sobre lo que nos rodea haciéndolos más eficientes.

Los dispositivos IoT están formados tanto por hardware como por software. Podemos decir que el hardware es la “cosa”, el instrumento, el dispositivo u objeto en sí. Puede ser esa bombilla que poníamos como ejemplo, un termómetro, máquina de producción, botones, puertas… Por otra parte está el software, que es lo que aporta esa interconexión a los dispositivos. Esos ejemplos que hemos puesto, tendrían la capacidad de contar con sensores que nos permita ajustar la luminosidad según las condiciones, que recopilen información de las personas que han cruzado esa puerta, hacer que esos botones sean inteligentes, etc.

El futuro del Internet de las Cosas

Forma ya parte del presente, pero lo cierto es que las empresas que se adapten desde ya van a tener mucho ganado. En los próximos años este tipo de dispositivos que conocemos como el Internet de las Cosas va a crecer exponencialmente y va a ser algo fundamental en esta nueva era.

Se espera que a lo largo de 2021 se superen los 15.000 millones de dispositivos IoT en todo el mundo. Una cifra sin duda más que significativa y que muestra la relevancia que esta tecnología tiene y va a tener en la sociedad.

Gran parte de esta cifra corresponde a todo tipo de empresas. Y es que hay que tener en cuenta que las organizaciones se adaptan cada vez más a este tipo de sensores IoT que ayudan en el día a día y mejoran diferentes aspectos. Esto es algo que podemos aplicar a todo tipo de sectores.

En definitiva podemos decir que los sensores IoT, el Internet de las Cosas, es algo que ya está integrado en nuestro día a día en muchos sectores, empresas y también a nivel doméstico, pero sin duda va a ser algo que será aún más importante próximamente.

Aplicación de los dispositivos IoT

Los dispositivos IoT a nivel empresarial los podemos utilizar en sectores muy variados. Prácticamente podemos decir que cualquier organización tendría la posibilidad de mejorar ciertos aspectos gracias a este tipo de tecnología. Optimizar el consumo eléctrico, obtener información del uso de determinados equipos, controlar la luminosidad para que se abran o cierren persianas, utilizar sensores para saber en todo momento la cantidad de fertilizantes necesarios en la agricultura...

Son muchas las aplicaciones de los dispositivos IoT cuando hablamos a nivel empresarial. Keycoes cuenta con un proyecto de sensorización de cajeros automáticos. De esta forma, gracias a un pequeño dispositivo, es posible controlar el abastecimiento de luz, saber en todo momento la temperatura o controlar diferentes aspectos de su uso con el objetivo de optimizarlo al máximo.

Pero esto es algo que podemos aplicar a muchos sectores, como hemos mencionado. La hostelería y restauración pueden mejorar y optimizar la manera en la que almacenan los productos necesarios en el día a día. Adaptar nuestro local con dispositivos IoT va a permitir que conozcamos en todo momento el stock disponible, que nos avise cuando un determinado producto empieza a escasear, saber si en una época concreta sería necesario reforzar la provisión de algún artículo en concreto.

También podemos mencionar la medicina, donde implantar este tipo de sensores inteligentes puede optimizar el tiempo de espera y la actuación en urgencias, monitorizar pacientes o máquinas en tiempo real; el sector de la banca, donde se puede lograr una mayor organización y una interacción más sencilla con los clientes; la seguridad, un sector que está presente en tantas empresas y organizaciones, sin duda tiene un salto cualitativo importante gracias a los dispositivos IoT, ya que podemos utilizar sensores para abrir o cerrar puertas, recibir avisos de posibles intrusos o monitorizar en todo momento los equipos y su buen funcionamiento.

Adaptarse a las necesidades actuales

El Internet de las Cosas también permite a las empresas adaptarse a las necesidades actuales de los clientes. Vivimos en una época en la que todo lo relacionado con lo remoto ha ganado mucha importancia. Hablamos por ejemplo del comercio electrónico, la posibilidad de que cualquier persona desde su casa pueda comprar todo tipo de productos a través de Internet.

Los sensores IoT están muy implantados en el sector transporte y de mercancías. Podemos ofrecer a nuestros clientes la posibilidad de conocer en todo momento dónde está el paquete que están esperando. De esta forma facilitamos la recogida, evitamos tiempos de espera o confusiones, entre otras cosas. Desde la central se puede monitorizar y optimizar procesos.

Esta tecnología sirve, por tanto, para acercarnos a las necesidades de los clientes. Es adaptarnos a los tiempos actuales. Sirve para agregar valor y nuevas posibilidades a la tecnología ya existente.

Pero no solo cuando hablamos del envío de paquetes y el comercio electrónico, sino también cualquier proveedor que necesite conocer en todo momento la cantidad de productos disponibles. Adaptar los vehículos con dispositivos IoT va a aportar un valor importante para esas empresas.

Mejorar en eficiencia y recopilar más datos

Sin duda algo general que podemos nombrar en todo momento es la mejora significativa en eficiencia. Estos sensores IoT van a permitir que nuestra empresa sea más eficiente a todos los niveles, gestionar mejor los recursos disponibles y saber adelantarnos a las circunstancias que puedan surgir.

Además la recopilación de datos es algo que igualmente va a estar presente en todo momento. Al tener dispositivos IoT vamos a poder obtener más información sobre el uso de determinados equipos, así como información que ofrecemos a los clientes.

Por tanto podemos decir que invertir en dispositivos IoT es mejorar nuestra organización para adaptarnos a los tiempos modernos. Es lograr una mayor eficiencia que en definitiva va a suponer también un ahorro económico, ser más productivos y tener más información para poder mejorar de cara a los clientes. Poder medir todo. Al dotar de información a cierto maquinaria, por ejemplo, sabiendo su ubicación se pueden evitar robos o malos usos ahorrándonos el coste que supondría esta pérdida.

La importancia de contar con profesionales para implantar sensores IoT

Tan importantes son los dispositivos y sensores IoT como el hecho de contar con un equipo de profesionales que puedan implantar esta tecnología en nuestra empresa. Es vital disponer de técnicos actualizados y adaptados a todo tipo de situaciones y necesidades.

Como hemos mencionado las aplicaciones del Internet de las Cosas son muy variadas. Tenemos muchas posibilidades para adaptar nuestros negocios y hacer que los dispositivos de nuestro día a día sean más inteligentes. Lograr una mayor integración con la red, tener sensores que nos permitan conocer más sobre su funcionamiento, necesidades y adelantarnos a posibles cambios.

Tener un equipo de profesionales detrás que no solo implanten esta tecnología, sino que también permitan resolver determinados problemas u optimizar esos dispositivos, es muy importante.

Seguridad y rentabilidad, valores que aporta la tecnología IoT

Algo muy importante es saber que estos dispositivos IoT aportan una mayor seguridad y rentabilidad a las empresas. Hacemos uso de la tecnología siempre para mejorar y este tipo de equipos nos permiten hacer que ambos factores se cumplan.

Para que un proyecto IoT salga adelante y no se quede por el camino es fundamental la integración. Esto significa que cada una de las piezas que componen ese proyecto van en la misma dirección. Podemos mencionar todo tipo de aplicaciones que utilicemos, la conectividad y dispositivos utilizados, la comunicación o el despliegue. Todo ello dentro de un mismo proveedor, y no cada parte por separado dando lugar a posibles problemas y que, en definitiva, el proyecto no logre el objetivo deseado.

Esto que mencionamos lógicamente va ligado a una mayor rentabilidad y seguridad. Valores que deben estar siempre presentes en cualquier proyecto de este tipo.